Rotary trabaja para mitigar la crisis migratoria
Los socios de Rotary han cambiado la vida de miles de refugiados
Las estadísticas son alarmantes. Más de 28 000 personas se ven obligadas a abandonar sus hogares cada día como resultado de la guerra, la opresión y la pobreza, lo que equivale a casi 20 personas por minuto.
A fines de 2016, 68,5 millones de personas, desde África Occidental hasta el sur de Asia, han sido desplazadas a la fuerza, lo que la convierte en la peor crisis migratoria de la historia.
La ola de migrantes y refugiados ha abrumado a la comunidad internacional, creando una particular tensión en los países vecinos y Europa. Turquía acoge al mayor número de refugiados, cifra cercana a los 3 millones. Pakistán está en segundo lugar. Alemania es el único país afluente en la lista de las diez principales naciones de acogida, ya que ha recibido alrededor de 700 000 refugiados y solicitantes de asilo.
La guerra de siete años en Siria ha sido el mayor motor de la crisis de refugiados, ya que millones de personas han huido del país desde que comenzó el conflicto en 2011.
Un porcentaje alarmantemente alto de los desplazados del mundo son niños y niñas. Asimismo, más de la mitad de los refugiados son menores de 18 años.
Los clubes rotarios están haciendo su parte para ayudar a aliviar la crisis mundial de refugiados con proyectos que ayudan a llevar agua y atención médica a los campamentos de refugiados, fondos para que las familias se muden a países más seguros y más. En los últimos años, los clubes y distritos han utilizado alrededor de 3 millones de dólares de fondos de Subvenciones Globales para proyectos y becas relacionados con los refugiados.
En el Día Mundial de los Refugiados, celebrado el 20 de junio de cada año, personas de todo el mundo brindan homenaje a la fuerza, el coraje y las contribuciones de los refugiados que abandonan sus hogares en una búsqueda desesperada de seguridad.
He aquí un ejemplo de cómo los rotarios han cambiado la vida de miles de refugiados:
• En Nueva Escocia (Canadá), el Club Rotario de Amherst trajo a su país a dos familias de Siria, país devastado por la guerra, donde los refugiados están comenzando una nueva vida. El club impulsó a otros grupos de la comunidad para ayudar a las familias a asimilarse con el pueblo y la cultura. El Club Rotario de Merritt, Columbia Británica (Canadá) también recaudó fondos para ayudar a una familia de Siria a asentarse en dicho país.
• El Club Rotaract de Nakivale (Uganda), está recaudando fondos para ayudar a los residentes de un gran asentamiento de refugiados a iniciar sus propios negocios. El club, que se encuentra dentro del asentamiento, también ayuda a los refugiados con azúcar, jabón y ropa.
• Pia Skarabis-Querfeld, rotaria y médica alemana, formó una red de médicos voluntarios para ayudar a los miles de refugiados que llegaron a Berlín (Alemania). En 2015, durante el apogeo de la afluencia de refugiados hacia Alemania, la organización sin fines de lucro que dirige, Medizin Hilft, tenía más de 100 voluntarios en su clínica. Su club, el Club Rotario de Berlín-Teirgarten, patrocinó una Subvención Global de clubes rotarios por USD 160 000 para financiar el proyecto hasta finales de marzo de 2018. También en Alemania, el Club Rotario de Lemgo-Sternberg, proporcionó recursos para capacitar a 60 voluntarios con el fin de enseñar alemán a unos 600 refugiados.
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65.60 millones
han sido forzados a abandonar sus hogares
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11.00 millones
refugiados son menores de 18 años
• Los distritos rotarios 2452 en el Líbano y 6560 en Indiana (EE.UU.) ayudaron a proporcionar cirugías cardiovasculares a 32 niños libaneses y 10 niños refugiados sirios. El distrito utilizó una Subvención Global de USD 185 000 para financiar las operaciones.
• El Club Rotario de Kigali-Virunga (Ruanda) colaboró con socios del Club Rotario de Dortmund (Alemania) para proporcionar pozos a un campamento de refugiados en el sector de Gahara en Ruanda.
• Los rotarios de Seúl (Corea) y Taipei (Taiwán) están utilizando los fondos de una Subvención Global de USD 89 000 para proporcionar equipos de diagnóstico de oído, nariz y garganta a la clínica Raphael de Seúl para dar tratamiento a refugiados norcoreanos.