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Becaria de Rotary intenta medir y detener la corrupción política

La becaria de Rotary, Lusiné Mehrabyan trabaja para resolver uno de los males más dañinos y generalizados del mundo: la corrupción política.

Mehrabyan, originaria de Armenia y criada en Ithaca, Nueva York, pudo observar la plaga de la corrupción tanto en su tierra natal como en la administración pública de EE.UU. 

“Creo que es algo común en todos los países y es una cuestión que debe abordarse”, señala. “Se trata de un problema muy complicado de solucinar ya que es difícil determinar su alcance” Mehrabyan espera establecer métodos fiables para medir esta plaga.  

Ella obtuvo un master en la London School of Economics (LSE por sus siglas en inglés) y luego continuó desarrollando su interés en la lucha contra la corrupción mientras trabajaba con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en Paris durante el año 2016.

Q: ¿Por qué te interesaste por la lucha contra la corrupción?

A: Al trabajar en un proyecto político para la LSE, investigué la corrupción en Estonia – concretamente, cómo los niveles de corrupción se ven afectados por la legislación que se aprueba para combatirla. Las tendencias observadas no tenían sentido para mí. Una de las formas de medir la corrupción es mediante encuestas, lo que no es un modo adecuado para obtener resultados objetivos ya que las personas pueden mentir en sus respuestas. Por este motivo, decidi ponerme en contacto con la OCDE. 

 

Lusiné Mehrabyan 

Ilustración de Monica Garwood

Q: ¿Cuál fue el énfasis de tu pasantía en la OCDE?

A: Trabajé en el departamento de Integridad del sector público. Debido a las habilidades cuantitativas que obtuve en la LSE, mi tarea consistió en aportar evidencias empíricas para la investigación. Trabajé junto a mi supervisor para mostrar lo que sucede con los niveles de productividad en un país con corrupción en el sector público. Asimismo, creé un índice para medir el nivel de conflictos de interés y las diferentes tendencias, como por ejemplo, si en un país represivo existe un mayor o menor nivel de conflictos de interés.  

Q: ¿Qué aprendiste?

A: Me di cuenta que necesitamos utilizar diferentes métodos y estrategias para medir la corrupción. Estoy actualmente realizando una investigación para determinar si la corrupción es intuitiva o intencional. Esta es una pregunta clave que aún no se ha explorado. Si el comportamiento corrupto es intuitivo, se pueden tomar pequeños pasos para modificar el entorno. Sin embargo, si resulta que el comportamiento corrupto es intencional, se debe aplicar más el enfoque normativo tradicional, que incluye sancionar y castigar a quienes se comportan de manera deshonesta.

Q: ¿Qué te gustaría hacer a continuación?

A: Cuando me mudé aquí, ocurrió el Brexit y me di cuenta que muchas personas se sentían ajenas a la disciplina de la economía. Estoy intentando llevar la economía a la esfera pública, con un toque de misterio, espontaneidad y diversión para que sea algo interesante. La ubicación, el tema y los oradores invitados se mantienen en secreto. Se presentarán diferentes conceptos económicos de una manera muy interesante e inmersiva. El principal objetivo es lograr que los ciudadanos se involucren más para que exijan que los políticos rindan cuentas de sus actos.

–Nikki Kallio

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